El otro dia escuche una entrevista radiofonica de Joaquin Leguina, y en ella expresaba su poco aprecio por los asesores de imagen, y como intentan maniatar la forma de ser de sus asesorados, muy especialmente en la clase politica, desvirtuando la forma de ser natural de cada uno, con el fin de que todo sea politicamente correcto, para los interes electorales de su partido o de su empresa, aunque muchas veces se falte a la objetividad, la razon, incluso a la verdad, o al sentido comun. Si a estos ingredientes unimos que la mayoria de los politicos viven pensado en lo que dicen o diran los medios de comunicacion, confundiendo muchas veces la opinion publica, con la opinion publicada, podemos encontrar alguna de las causas de la situacion politica en que nos encontramos, y en los distintos debates que se montan sobre como se dicen las cosas, en lugar del fondo de la cuestion, es decir parece que importa mucho mas la forma que el fondo.
Y sobre todo algunos que se rasgan las vestiduras cuando son otros los que meten la pata, y en cambio cuando son ellos los que la meten hasta la ingle no pasa nada. Hay varios dichos populares que reflejan muy bien estas situaciones "cuando el pobre se emborracha lo llaman el borrachon y cuando es el rico el que se emborracha dicen que malico esta el señor".
Toda esta introduccion viene a cuento a las declaraciones de la Alcalde de Getafe Pedro Castro, en las que en las palabras utilizadas no fueron las mas adecuadas, sobra algun atributo masculino, pero no en el fondo de lo que dijo. En el Pais de ayer Enrique Gil Calvo, escribio un articulo de opinion titulado Getafe, que recomiendo su lectura, por ser muy esclarecedora.
Aun que hay un enlace para ver el articulo completo, quiero resaltar el siguiente parrafo:
Y frente a esto, a las huestes de Esperanza Aguirre no se les ocurre nada mejor que abrir un frente de batalla por una causa nimia contra el alcalde de Getafe y presidente de la FEMP. ¿Por qué han decidido hacerlo así? ¿Porque creen que es una pieza fácil de cazar, cobrándose con la cabeza de Pedro Castro el eslabón más débil de la cadena de mando socialista? A mí se me ocurre otra explicación mejor, y es que Pedro Castro tenía toda la razón: los madrileños son tontos al votar al PP contra sus propios intereses. Y esa verdad como un puño es la que a Esperanza Aguirre no le conviene que se sepa, por lo que prefiere matar al mensajero para poder taparla.
A mi personalmente Pedro Castro siempre me ha caido bien, y desde aqui quiero mandarle animos para que no reble y siga adelante
No hay comentarios:
Publicar un comentario